Shakespeare

"No temas a las sombras ni al olvido, que tras la noche un nuevo día brillará sonriente y con la espada rota del héroe caído se forjará la espada del valiente..." (W.S.)



Quizás la mayoría de nosotros comienza a escribir la historia de su vida mientras la está viviendo. Otros esperan a que pasen grandes cosas y otros escriben grandes cosas que quizás nunca vivirán… (Adolfo)































































lunes, 1 de abril de 2013

Como para ir atando cabos...        
                                                                                                            Adolfo Pedroza (*)
Así decía mi abuelo cuando nos contaba algunas historias en la que había que unir cuidadosamente algunos hechos para entender el todo...

En Rosario, al igual que en Santa Fe capital, se llevan a cabo los Juicios por Crímenes de Lesa Humanidad a los genocidas locales que participaron del nefasto Proceso de Reorganización Nacional ejecutando un plan organizado y sistemático de represión ilegal.

También en Rosario, el gobierno logró recuperar un cine del año 45; salvándolo de la piqueta primero y remodelándolo después, para devolverlo a la comunidad como un cine de carácter público “que permita a los santafesinos un espacio de formación, divulgación e intercambio de diferentes culturas”, según palabras de la Ministra M."Chiqui" González en la reapertura del cine. Aquí, también, hay que destacar la acción de La Asociación de Amigos del Cine El Cairo que asumió la defensa de este ícono cultural a su cierre en el 2007.

Así como estuvimos presentes, con el mayor de mis hijos, 21 años, en el inicio de los juicios; un mes después de su inauguración estuvimos en la sala de El Cairo para ver el estreno de “Tierra Sublevada” (Parte1: Oro Impuro) con la presencia del Cineasta y Diputado electo Pino Solanas. En sus palabras introductorias dijo que “Cuando uno cuenta esto... la gente cree la mitad de lo que se le dice. Entonces es bueno que lo vea. Que vea lugares, que escuche testimonios directos; que se confronte con personas como ellas que luchan por algo que nos pertenece a todos. Quiero que los jóvenes vean y tomen conciencia de esto que le está pasando al país en el que ellos viven y qué es lo que le van a dejar”

Luego del aplauso al director, El Cairo nos brindo la proyección en 35 milímetros con sonido “surround” y efectos especiales, esos que hacen que las voces se escuchen desde todas partes y las imágenes te calen hondo para mostrarte como te saquean.

Uno tiene a su hijo al lado y siente vergüenza de lo que la pantalla le muestra. Se acuerda que le dio a leer “Las venas abiertas de América Latina” de Eduardo Galeano y que ahora lo observa como mira una pantalla en la que ve una historia repetida por años en nuestros pueblos.

Es lo que hace Pino Solanas, retratar una parte de nuestra realidad que nos confronta. Desfilan las estafas y miserias en las que vivimos rigurosamente documentadas. Ya dijo que esta es una primera parte que sólo nos muestra el saqueo de los minerales y que luego habrá otra que nos mostrará los negociados y saqueo del petróleo.

Por la pantalla desfila la política neoliberal de los 90 que propiciaron el saqueo de minerales (metales) y los hidrocarburos con la total complacencia y complicidad del Estado. De aquel Estado y del estado actual. Como no pensar que la concreción de este neoliberalismo esta perfectamente ligada al estado genocida en aquella mentada “Reorganización” de 1976.

No sólo habrá saqueo de minerales en “yacimientos a cielo abierto”, ya prohibidos a nivel mundial, sino que también habrá procesos con substancias altamente tóxicas y contaminantes del suelo y –fundamentalmente- del agua.

Esa agua natural y pura que se derrocha en millones y millones de litros y que no solo no servirá para el consumo humano, sino que también contaminara el suelo y lo convertirá inútil para cualquier producción a posteriori. No habrá rédito alguno y la promesa es igual a la realizada al gran Inca Atahualpa, lo que sí hay es un serio –y posiblemente irreversible- ataque al medio ambiente y una segura expulsión de los pobladores asentados históricamente en esos lugares.

Los discursos de nuestros actuales gobernantes son altisonantes, pero la realidad no ha cambiado y la legislación, junto a Diputados y Senadores, sigue defendiendo a los saqueadores. La esperanza está puesta en la lucha de aquellos y aquellas que se “auto-convocan” y aún resisten. Pero nos tendremos que ir haciendo a la idea de que no alcanza con un puñado o unos cientos, ni con la denuncia de los ambientalistas, ni con una o dos batallas ganadas.

El compromiso deberá ser de todos y todas y no solo esperar que “la tierra se subleve ante el saqueo de los metales y la contaminación” como dice el volante que anuncia la película y que mi hijo mantiene apretado fuertemente en su mano.

(*) Originalmente editado  por la agencia argentina "Prensa Ecuménica" de Argentina (Martes, 20/10/2009) (También en la  ex-Mercosur Noticias y en otros blogs Alternativos que lo levantaron de allí dentro del mismo año en diferentes lugares de A.L.)